SABÍAS QUE ? Proclamación de Abderramán I como emir de Córdoba (756)

¿SABÍAS QUE…?

 

1. Rafael Nadal es el séptimo tenista de la historia en número de semanas (141) como mejor jugador del mundo y el undécimo en semanas consecutivas (56).

2. Estados Unidos es el campeón de la historia por semanas (896) y España es el sexto.

3. España es el país que más jugadores después de Estados Unidos (6) ha colocado en el número 1, junto a Suecia y Australia.

 

16 de marzo

 

 Proclamación de Abderramán I como emir de Córdoba (756)

Miembro de la dinastía omeya derrocada que gobernaba el califato de Damasco, Abderramán o Abd-al-Rahman (Dayr Hanina, Damasco, h. 731) fue quien instauró el primer emirato independiente en al-Andalus, punto de partida del periodo más brillante de la historia de la cultura árabe en España.

Abderramán sobrevivió a la matanza que casi exterminó a su familia durante la revolución abasí del año 750 e inició, con apenas veinte años, un largo periplo que finalizaría en tierras andalusíes. Desde el norte de África envió emisarios a la península Ibérica con el fin de buscar respaldo para su causa. Los mensajes de Abderramán no encontraron buena respuesta entre los gasíes, facción que ostentaba el poder, pero sí entre las tropas sirias que su abuelo Hishem tenía en la Península, las mismas que le dieron apoyo para cruzar el estrecho de Gibraltar y desembarcar en Almuñecar en 755. Al frente de un ejército de sirios, yemeníes y bereberes, derro­tó al valí de al-Andalus, Yusuf al-Fihri. Poco después entró en Córdoba y el 16 de marzo de 756 fue nombrado emir. Fue así como creó el primer estado musulmán independiente del califato de Damasco.

Los primeros años del emirato estuvieron llenos de dificultades. Sufrió una rebelión que fue sofocada en 759; en 763 comenzó una larga serie de sublevaciones financiadas por la nueva dinastía abasí de Damasco, que no se resignaba a la pérdida de al-Andalus. Esta fue la causa por la que Abderramán creó un ejército muy potente formado por bereberes del norte de África y otros guerreros procedentes de la Europa cristiana, ya que su territorio estaba mayoritariamente habitado por mozárabes, árabes, sirios y bereberes nacidos en la Península.

El Gobierno de Abderramán fue organizado siguiendo los modelos del régimen omeya de Damasco, nombrando para los principales puestos de la administración y del ejército a sus familiares y clientes omeyas. El emir dio los primeros pasos en la evolución que convertiría a la ciudad de Córdoba durante los dos siglos y medio siguientes en uno de los mayores centros comerciales e intelectuales del mundo. Con él también se inició el desarrollo de la deslumbrante arquitectura que caracterizaría al califato cordobés mediante un importante programa urbanístico en el que destaca el comienzo de la construcción de la gran mezquita de esa ciudad (h. 785), ampliada luego por sus sucesores Abderramán II (décadas 830-860), Alhakén II (h. 960) y Almanzor (a finales de la de 980).

La consolidación de la fortaleza del islam en la Península, lograda por Abderramán I, no significó el aislamiento del al-Andalus independiente respecto de la civilización árabe, sino todo lo contrario, ya que las preceptivas peregrinaciones a La Meca y los intercambios comerciales con Bagdad y El Cairo mantuvieron las bases de la unidad cultural y las mutuas influencias, entre ellas la introducción de la poesía árabe en la naciente cultura arábigo-andaluza. Toda esta labor sería continuada tras su muerte (noviembre de 788) por su hijo y sucesor Hisham I, que tendría primero que enfrentarse a sus dos hermanos, que le disputaron el poder.


Понравилась статья? Добавь ее в закладку (CTRL+D) и не забудь поделиться с друзьями:  



double arrow
Сейчас читают про: