Sabias QUE. Carmen conde, primera mujer académica de número de la RAE (1978)

¿SABIAS QUE…?

1. El quemadero de herejes de Sevilla estaba situado más o menos donde hoy se encuentra la estatua ecuestre del Cid Campeador, entre la sede central de la Universidad y el Prado de San Sebastián.

2. En los primeros años, el Tribunal más activo fue el de Sevilla. Los archivos revelan que entre 1481 y 1488 ejecutó a setecientas personas.

3. El Tribunal de la Inquisición que procesaba a un acusado solo contemplaba absolverlo si había sido víctima de falso testimonio.

9 de febrero

 Carmen Conde, primera mujer académica de número de la RAE (1978)

Tras una sesión ordinaria de debate sobre determinadas palabras a incluir en el Diccionario de la RAE, la noche del 9 de febrero de 1978 los académicos se dispusieron a votar la persona que estaba llamada a ocupar la silla que el fallecimiento de Miguel Mihura Santos había dejado vacante tres meses antes. Trescientos años después de la fundación de la Real Academia de la Lengua, por primera vez sus miembros acordaban incluir a una mujer, aunque no resultó nada fácil dar con la elegida: hicieron falta tres rondas de votos secretos para que saliera el nombre de Carmen Conde.

Es cierto que en 1784 el propio Carlos III en persona introdujo a Isidra de Guzmán en la Real Academia, aunque solo a título honorario, pero también lo es que la RAE, tradicionalmente, había rechazado de manera sistemática la admisión de mujeres en la institución por el mero hecho de serlo. Y es que en 1853, reunidos en asamblea, los académicos resolvieron, como respuesta a la solicitud de Gertrudis Gómez de Avellaneda, no aceptar mujeres en la Academia, medida a la que se acogieron en posteriores ocasiones para hacer lo mismo con Emilia Pardo Bazán en 1912 y Concha Espina en 1928 y 1930. Aunque dos mujeres habían conseguido ser aceptadas como candidatas (Blanca de los Ríos en 1928 y María Moliner en 1972), perdieron sus respectivas votaciones frente a sus contrincantes varones.

Carmen Conde no tuvo que enfrentarse en aquella ocasión a ningún hombre, pero abrió la puerta de las convocatorias para que las mujeres fueran elegidas por deliberación o por votación: Elena Quiroga de Abarca (1983), Ana María Matute (1998), María del Carmen Iglesias (2002), Margarita Salas (2003), Soledad Puértolas (2010), Inés Fernández-Ordóñez (2011), Carme Riera (2013), Aurora Egido (2014) y, como electa, Clara Janés (2015). El 9 de febrero de 1978 quedó grabado en las efemérides, pero algún día ya no será necesario hacer mención a ninguna lista por géneros como esta.

La poetisa Carmen Conde (Cartagena, 1907-Madrid, 1996), maestra de escuela y periodista que también escribió novelas y obras teatrales, recibió a lo largo de su vida numerosos galardones literarios, entre los que destacan el Premio Nacional de Poesía (1967), el Premio Ateneo de Sevilla (1980) y el Premio Nacional de Literatura Infantil y Juvenil (1987). El día que se sentó en la silla K de la Real Academia leyó su discurso de ingreso, Poesía ante el tiempo y la inmortalidad, que comenzaba haciendo alusión a su admisión en la Academia por motivo de género y su condición de mujer: «Mis primeras palabras son de agradecimiento a vuestra generosidad al elegirme para un puesto que, secularmente, no se concedió a ninguna de nuestras grandes escritoras ya desaparecidas. Permitid que también manifieste mi homenaje de admiración y respeto a sus obras. Vuestra noble decisión pone fin a una tan injusta como vetusta discriminación literaria».